Risa

En la palestra de desconocidos, buscó a su lado el calor. Y simulando mojarle al oído, le besó el cuello y le dijo: Me gustas tanto...quisiera aprenderme tu nombre. Me gustas tanto que no sé por donde voy...Me acerqué suspicaz y le tendí un anzuelo, vamos a fumar un porro ahí, ¡me gusta verte reír! Me gusta tanto tu coqueteo, me gusta tanto verte reír. Me gusta tanto tu coqueteo...Tengo un idea, no me hables de ti, y mucho menos de tu pasado. Algo en tus labios color carmín, suguiere que vayamos al grano. Me gustas tanto...quisiera aprenderme tu nombre. Me gustas tanto que no sé por donde voy... me gusta verte reír, me gusta tanto tu coqueteo, me gusta verte reír.

Oh la alegría llegó, la alegría llegó y sé que no dura para siempre, Oh la alegría llego, la alegría llego y sé que no dura para siempre...Me gustas tanto.