Seguidores (gracias!)

miércoles, 27 de noviembre de 2013

Cerrando etapas

Hace un tiempo que no escribía. Y hoy, encontré una excusa (muy linda) para volver a hacerlo.

Es difícil cerrar una etapa. Es mirar para atrás en la historia de la vida, y ver, como tantas cosas cambian. Cuantas personas ya no están y cuantas otras aparecen para quedarse para siempre.
Crecer da miedo. Porque da miedo lo desconocido. Crecer significa muchísimas cosas. Pero principalmente crecer es aprender, tropezarse y volver a levantarse para seguir. En ese camino de crecimiento va a haber piedras, que depende de uno patearlas.
Considero que a lo largo de mi vida hice muchos esfuerzos. Algunos logrados y otros no. Todavía me falta voluntad para muchas cosas que deseo cumplir a futuro. Pero hoy, hoy siento que todo el esfuerzo que me costó durante unos años, da fruto. Me siento fuerte. Me siento feliz y triste. Sí. Feliz porque sé que después de esto, mi vida va a cambiar, mis días van a ser diferentes. Triste, porque (aunque me de miedo) sé que estoy creciendo, sé que tengo que crecer un poco más que ayer.

Tanta gente estuvo presente en cada momento duro, en cada tropezón que me dolió. Pero sin embargo, la gente que hoy sigue a mi lado me demuestra día a día que puedo. Que vivir es lindo. No me dejan sola, y eso es algo que día a día agradezco. No cualquiera puede estar tan presente como mi vieja, mi familia y mis amigas. Mis grandes amigas.
Me rodee de gente que supo y sabe valorar la historia que tengo. Que me acepta y no me juzgó nunca. Que cada día me hace sentirme más querida y valorada.
Amigas que sufren si no estoy bien, amigas que me abrazan con cada cosa que puedo superar. Y cuando algo es difícil, ahí están. Para apoyarme y acompañarme.

Siento que era ayer cuando estaba tan hundida en lo profundo de un pozo, donde no podía ver a toda esa gente. Fue ayer que no tuve más ganas de seguir, de dejar todo como estaba, sin importarme nadie. Nadie más que yo. Solo pensaba en mí, en que no iba a poder, y que nada iba a mejorar. Por un tiempo se me cerraron los ojos, los ojos que hoy ven lo equivocada que estaba. Se me cerraron los ojos, impidiéndome ver cuanta gente no quería lo malo para mí.
Se me cerraron los ojos que hoy ven a mi mamá tan feliz. Si hay una persona que sufrió y fue feliz a la par mío, es ella. Gran parte del cielo es tuyo mamá, porque dudo mucho que alguien pueda soportar y seguir al pie del cañón como lo hiciste y haces vos. Soportar cada locura, cada lágrima y cada momento de felicidad también. Siento que te debo una vida entera. Me salvaste mamá. No hay mejor manera de resumirlo. Vos me salvaste. Y lo seguís haciendo.

Tengo tantas ganas de agradecer a cada persona que estuvo y sigue tan presente. A cada uno le debo mil horas de abrazos y gracias eternos. 

No puedo dejar de pensar en mi cabeza como pasó todo. Lo rápido que pasó. 
Una vez me dijeron: Vos podes, lo que pasa es que no sos capaz de primero ver todos tus logros y de darte cuenta lo fuerte que sos.
Y era verdad. Nunca fui capaz de ver todo lo que logré, porque siempre preferí ver lo malo de mi vida y todas aquellas cosas que no pude lograr. Pero hoy me doy cuenta, de cuantos logros tengo en mi vida. Y son más de los que yo creía!

GRACIAS es todo lo que me salió decir a cada persona que me felicitó. 
Porque todos tuvieron y tienen palabras que me llegan, que me dan siempre energía a seguir y no bajar los brazos. Creo que lo mejor para mi vida esta llegando, y estoy feliz. Y hacía mucho tiempo que no sentía lo que hoy siento. Porque de vez en cuando, es hermoso sentirse orgullosa de una misma. Es hermoso poder ver los logros propios Y CON TUS PROPIOS OJOS.
Cierro una etapa, y con ella se van tantas lágrimas, tantas broncas, tanto enojo, tantos "no quiero seguir más, no puedo", para darle la bienvenida a toda esa energía positiva, para todo eso nuevo, que aunque de miedo, está bueno!
.
.
.
.
.
.
*Quiero contar algo emocionante y hasta raro que me pasó hoy, cuando volví de rendir y aprobar. 
Entré a mi casa, pero antes me crucé con una vecina, quien me felicitó como si fuera alguien de mi familia, y me sonrío de una manera tan linda que me llegó al corazón, junto con su abrazo. En ese momento, caí a medias de lo que había pasado. Había aprobado! Después de todo mi esfuerzo por terminar, el secundario llegaba a su fin. Entré al asensor, y sin darme cuenta ya estaba llorando. Sintiendo una energía tan linda. Y lo sentí. Sentí la voz de mi abuelo felicitándome, sentí algo que nunca sentí y no puedo expresar. Fue lo más lindo. Todavía sigo emocionada y mientras escribo esto, te siento cerca mío abu. Me gustaría que bajaras un ratito, y me des un abrazo que duré la vida entera. 



No hay comentarios:

Music